Todo está en armonía en el acuario Den Blå, El planeta azul, en Copenhague, Dinamarca. Todos los elementos del acuario más grande del norte de Europa, tanto dentro como fuera, han sido diseñados pensando en el agua. El recurso más abundante de la tierra es su punto central. El edificio en sí fue diseñado con la forma de un remolino y alberga siete millones de litros de agua en sus exposiciones.
En lo que respecta a atracciones de agua exteriores con elementos educativos, el acuario eligió Water Journeyde Vortex, instalando un módulo Labyrinth, queofrece una experiencia interactiva y enseña a los niños las bases del juego creativo y los principios fundamentales de causa y efecto por medio de la manipulación y la coordinación de las funciones del juego. “Además, ofrece la oportunidad de jugar con agua sin mojarse demasiado”, concretan desde Vortex.
Ubicado en el área de juegos conectada al acuario, el módulo Labyrinth promueve las visitas durante los meses de verano, cuando el clima cálido no es adecuado para realizar actividades o visitar las exposiciones en el interior del edificio. “Este módulo ha demostrado ser un lugar de encuentro comunitario popular para los padres y visitantes, que se quedan más tiempo contemplando el agua seguir su curso”, señalan desde la firma. “El módulo es una atracción importante que agregamos a nuestra área exterior. Nuestros visitantes tienen una razón adicional para visitarnos, incluso si el clima es cálido y prefieren estar afuera. Ahora pueden hacerlo mientras disfrutan de Water Journey”, apunta el vicepresidente del acuario Den Blå Planet, Kai Frydendah.
Water Journey ha sido galardonado en la octava gala anual de los Grands Prix Du Desing. Las empresas de diseño, Dikini y Daily Tous les Jours han sido las encargadas de desarrollar el producto, que se fabrica y comercializa por Vortex. Ofrece a arquitectos paisajistas, diseñadores y hoteles nuevas oportunidades para crear áreas relajantes de juego accesible y multi-generacional. Creado para imitar el movimiento del agua en la naturaleza, ofrece tanto una experiencia interactiva para los niños como un lugar de encuentro común para los padres, que se reúnen para ver el agua en su recorrido. Los módulos están diseñados para estimular a los niños de todas las edades física, intelectual, emocional y socialmente para aprender interactuando y jugando con el agua.
Palancas, compuertas y bombas crearán una emocionante reacción en cadena de efectos de agua para capturar la imaginación, estimular el trabajo en equipo y enseñar a la relación entre causa y efecto. Flexible en la configuración, Water Journey está disponible como un módulo único o como un conjunto de módulos para adaptarse a cualquier espacio y diseño específico.