Las juntas de movimiento son zonas de interrupción de los pavimentos o revestimientos cerámicos para permitir posibles variaciones dimensionales, en este grupo se encuentran las juntas estructurales, las juntas perimetrales y las juntas intermedias.
Juntas estructurales
Cuando el soporte tenga juntas estructurales deben dejarse entre las baldosas juntas coincidentes con estas. Deben llegar hasta el soporte, incluyendo la capa de desolidarización si la hubiese, y su anchura debe ser, como mínimo, la de la junta estructural del soporte. Se rematan generalmente con materiales de elasticidad permanente como perfiles o cubrecantos de plástico o metal, másticos, cubrejuntas externos etc.
Juntas perimetrales
Se deben dejar en los límites de las superficies horizontales a embaldosar con otros elementos tales como paredes, pilares que puedan quedar exentos y elevaciones de nivel. Su anchura será superior a 5 mm. Se puede prescindir en recintos menores de 7 m 2.
Deben ser continuas y pueden hacerse usando un material compresible como poliestireno expandido, o rellenarse con silicona, pudiendo quedar ocultas por el rodapié. Deben llegar hasta el soporte, salvo que éste ya esté revestido de un material maduro y estable, como yeso o enlucido. La omisión de las juntas perimetrales es una de las causas más frecuentes del levantamiento de embaldosados.
Juntas intermedias
Las grandes superficies revestidas con baldosas cerámicas deben subdividirse con juntas de partición, cuya función es evitar que se acumulen dilataciones y contracciones. La superficie máxima a revestir sin estas juntas o particiones es de entre 50/70 m2 en interiores y de la mitad en el exterior. El número de juntas debe ser mayor en las superficies en las que se puedan esperar grandes oscilaciones térmicas o vibraciones.
En los suelos que vayan a estar sometidos a tránsito peatonal intenso, rodaje con ruedas duras o arrastre de cargas pesadas, la posición de las juntas debe replantearse de forma que no estén cruzadas en el paso; si esto no fuera posible, se deben utilizar en las juntas perfiles que tengan los bordes protegidos con metal. Estas particiones o juntas deben cortar tanto el revestimiento cerámico como el adhesivo y el mortero de base, y su anchura no debe ser menor de 5 mm.
Pueden rellenarse con perfiles o materiales elásticos o con el material de relleno de las juntas de colocación, siempre que haya transcurrido al menos un mes desde la colocación del mortero de base.