Las obras de La Ciudad de la Cultura, de Santiago de Compostela, comenzaron en 2001 y ya ha absorbido una inversión de 300 millones de euros. La determinación de paralizar las obras viene originada por la falta de financiación del ambicioso proyecto, firmado por el arquitecto Peter Eisenman. El macrocomplejo cultural ve así cómo dos de sus seis edificios se quedan sin construir, una ampliación que podría rondar los 150 millones de presupuesto.