José Castellano Esteve nació en Borriol (Castellón) el 13 de marzo de 1958. Licenciado en Geografía Económica por la Universidad de Valencia, posee estudios de cerámica que realizó en la Escuela de Artes y Oficios de esta misma ciudad.
Desarrolla su labor profesional en las empresas Cerámica Decorativa, en la que se hace cargo de la dirección comercial, y D´Oliva Terra en la que es consejero delegado.
Es además un hombre volcado en el sector cerámico, habiendo pertenecido al consejo rector de Aice y también al de Alicer en su momento; a la junta rectora de Ascer, de la que es vicepresidente desde 2011 y en donde preside la comisión de promoción nacional de Ascer.
También es miembro del comité organizador del certamen Cevisama y lo ha sido de la comisión ejecutiva del Instituto de Promoción Cerámica, además de ser consejero asesor de calidad de la Universitat Jaume I.
Asimismo, pertenece al consejo de administración de N.B. de Actividades y Servicios, y es director de Iberamic.
Tras su nombramiento, ha recordado a su amigo fallecido, Joaquín Piñón, y a otras personas que, según ha dicho: “me dieron a conocer hace ya décadas el trabajo de los institutos ITC y Alicer, centros que siempre han trabajado en la investigación orientada a que nuestras industrias prosperen para enriquecer y mejorar nuestro entorno económico”.
El ya presidente de Aice, José Castellano ha pedido a las instituciones que sigan apoyando al clúster cerámico industrial de Castellón, “porque es el que más riqueza genera a nivel local, en la Comunidad Valenciana y en España”.
“Les pedimos a las administraciones –continuó– que nos sigan ayudando a realizar I+D que favorezca el desarrollo de la industria cerámica y así poder mantener nuestras exportaciones, que se realizan a más de 183 países, con un 70% del total de nuestra producción y que este año han llegado a superar a las de Italia, nuestro principal competidor”.
José Castellano también ha lamentado la “poca visión de futuro” y el “discurso anti-educación” que emana actualmente de las instituciones a la hora de recortar y mermar recursos en educación e I+D+i y ha puesto como ejemplo el “antes y el después” que vivieron la sociedad castellonense y la industria desde la creación del Colegio Universitario, el ITC y la Universitat Jaume I.
Castellano ha animado a todos a esforzarse en una misma dirección para lograr “sobrepasar los difíciles tiempos que se están viviendo” y poder aumentar la excelencia de un centro como el ITC, referencia a escala mundial en investigación.