Así, la firma ha defendido recientemente en Nueva York, ante altos funcionarios y técnicos expertos, su proyecto que permite mejorar la calidad de vida delas personas, en situaciones de emergencia.
La propuesta, denominada Suri shelter, ofrece grandes mejoras de habitabilidad respecto a las tiendas de campaña o contenedores metálicos que se utilizan habitualmente en situaciones de catástrofes o guerras, por un coste muy competitivo. Ligero, de fácil y rápido montaje, el módulo consigue una gran diferencia térmica entre su interior y exterior, siendo su tejido transpirable e impermeable. Además, el hecho de estar elevado del terreno y rellenarse con materiales del lugar le confiere gran resistencia y estabilidad, así como una gran protección ante impactos.
Experiencias de Lorca y Haití
La arquitecta Nathalie Gidrón de Barbarela Studio, explica que este proyecto se originó durante la reconstrucción del terremoto de Lorca (Murcia) en mayo de 2011 y las experiencias vividas por los equipos de voluntarios españoles en el terremoto de Haití. "Allí tuvimos la oportunidad de comprobar in situ las condiciones de vida, a menudo infrahumanas, en las que se encontraban las víctimas, ubicadas en improvisados campamentos de refugiados", indica.
Y añade que el contacto de primera mano con las agencias especializadas de la ONU "nos hizo ver que ésta no era una necesidad aislada, sino que lamentablemente esta situación se está viviendo cada día en muchas partes del mundo".
Los módulos Suri shelter disponen también de unidades fotovoltaicas que dotan de luz y electricidad al refugio. Asimismo, permiten la recogida del agua de lluvia y su potabilización, resistiendo mejor situaciones climáticas fuertes como vientos, nevadas, terremotos, tormentas de arena o inundaciones.
"Nuestra experiencia en el campo de la rehabilitación de edificios, así como nuestra filosofía empresarial consistente en buscar solución a problemas que parecen imposibles de resolver, actuó como un resorte que nos ha llevado a trabajar durante tres años en el diseño de un producto que busca facilitar la forma de vida de todas aquellas personas que pueden vivir en condiciones similares. Hoy en día, el producto es ya una realidad y las primeras unidades estarán disponibles éste verano" cuenta Pedro Sáez, de Urbana de Exteriores.
“Para nosotros es una oportunidad haber sido seleccionados entre pocas empresas de todo el mundo, y presentar a altos funcionarios de la ONU y técnicos expertos nuestro producto”, añade.
El proyecto, que ha contado con la implicación de la empresa DuPont, está apoyado por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), perteneciente al Ministerio de Economía y Competitividad.