El puente, construido con hormigón Cemex de Alicante, ha sido una de las cuatro obras españolas que optaban a los premios que la FIB otorga cada cuatro años para obras exteriores de arquitectura e ingeniería construidas en hormigón. Así, además de su innovadora estructura, el jurado ha tenido en cuenta el uso de hormigón blanco, un material que ha adquirido un desarrollo progresivo en la arquitectura e ingeniería contemporáneas y que representa un elemento diferenciador.
Los profesores de la Universidad de Alicante, el arquitecto Joaquín Alvado y los ingenieros Salvador Ivorra y Miguel Ángel Crespo, autores del proyecto, han resultado finalistas junto a una representación de las mejoras obras 2010-2013 de todo el mundo, entre las que destacan el Shenzen Vanke Center (China) de Steven Holl, el Queen Alia Airport (Jordania) de Norman Foster, el Hoover dam Bypass (USA) de David Goodyear, el Térénez Bridge (Francia) de Michel Virlogeux, entre otros.
La federación internacional pretender impulsar con estos premios cualquier avance en relación con el hormigón estructural, ya sea científico, técnico, económico o estético. La FIB está integrada por 41 países y España está representada por la Asociación Científico Técnica del Hormigón Estructural (ACHE), que es la que propone los candidatos al premio.