Tal y como apunta la consultora inmobiliaria RTV, el crecimiento de la demanda continúa predominando en ciudades como Barcelona o Madrid y en este último año se ha incrementado entre el 20 y 25%. El plazo de cierre de dichas operaciones se ha reducido en este último cuatrimestre dado la presión compradora y la ausencia de oferta de edificios de calidad a precios competitivos. Especialmente en Barcelona, el auge turístico ha hecho que la demanda de apartamentos turísticos haya incrementado al adaptarse más al perfil de cliente potencial predominante (estudiantes, familias, turismo de fin de semana...), y ser más flexible que la oferta hotelera en cuanto a precio y prestaciones como la disponibilidad para grupos o cocina propia, que en muchos casos evitan gastos innecesarios en el ámbito de la restauración.
Inversión de entre 3 y 15 millones de euros
Los inversores, family offices nacionales y extranjeros de distintas procedencias como británica, francesa, suiza, alemana o israelí, están dispuestos a invertir entre 3 y 15 millones de euros en activos con buena ubicación (centro ciudad), que dispongan de la totalidad del edificio y que estén ya vacíos o se puedan vaciar a corto plazo, además de que permitan efectuar obras de rehabilitación íntegra. En la actualidad, los precios de venta por metro cuadrado están entre un mínimo de 2.000-2.500 €/m2 y un máximo de 3.500-4.000 €/m2, a lo que se debe de añadir el coste de rehabilitación y equipamiento que oscilará entre los 1.000 y los 1.500 €/m2 teniendo en cuenta el estado del inmueble y su ubicación.