Según fuentes de RtV Grupo Inmobiliario, "la recuperación inmobiliaria empieza a calar, pero la salida de la crisis será a dos velocidades". En el norte, más rápida debido a grandes ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia y determinadas zonas turísticas a causa de una mayor demanda, por lo que existe menos stock. Y más lenta en el sur por el importante stock de vivienda vacacional construida a raíz de los grandes planes urbanísticos desarrollados que multiplicaron por 3 y por 4 la oferta construida existente, y que aún ahora se tardaran en absorber.
La previsión para los próximos trimestres es de una continua consolidación de la recuperación a consecuencia de una mejora del crédito y de la actividad económica del país. La consultora inmobiliaria RtV apunta que a ello se le sumará un aumento de compras por parte de inversores extranjeros y también nacionales (que paralizaron su posible compra esperando un ajuste del precio que ahora ya ha llegado) y un mayor atractivo de la vivienda como bien de inversión a causa de la bajada de precios de los últimos años. El marcado descenso de la rentabilidad de otros activos financieros como los depósitos bancarios o la deuda pública contribuirán al mismo tiempo al afianzamiento.
A pesar de que es un buen momento para comprar gracias a la recuperación de los precios, "hay que ser selectivos en el producto”, comenta Vicenç Ramón, gerente de RtV Grupo Inmobiliario, quien afirma que deben priorizarse buenas localizaciones en zonas consolidadas, de obra nueva o en muy buen estado (o efectuar el ajuste pertinente de precio), y zonas con demanda potencial asegurada que garantice su posible venta en el futuro.