El segmento de instalación mantuvo en 2014 la tendencia a la baja de años anteriores, apuntando los datos provisionales a un retroceso del 5% para el conjunto del año.
Por su parte, el negocio de mantenimiento y reparación, que siguió acusando la alta competencia en precio, cayó algo menos de un 2% al cierre de 2014 y se situó en torno a 1.790 millones de euros.
Las empresas del sector presentan una creciente orientación hacia mercados extranjeros. De este modo, tras registrar un crecimiento superior al 10% en 2013, el valor de las exportaciones de equipos se situó alrededor de los 450 millones de euros tanto en dicho año como en 2014.
Las previsiones para 2015 apuntan ya a una moderada recuperación del volumen de negocio, que podría alcanzar una cifra superior a los 2.200 millones de euros, en torno a un 2-3% más que en 2014, gracias a la gradual reactivación de la construcción de edificios, que se consolidará en el año 2016.
El número de empresas que en 2013 se dedicaban a la fabricación, venta, instalación, mantenimiento y reparación de aparatos elevadores, y a la fabricación de componentes y puertas era de alrededor de 500, cifra que ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos años.
El sector presenta una creciente concentración, toda vez que la sensible caída de la demanda, el aumento de la competencia y la dificultad de acceso a financiación han motivado la desaparición de empresas de mediano y pequeño tamaño. Asimismo, los principales grupos han seguido llevando a cabo la adquisición de compañías ya instaladas, con el objetivo de incrementar su cartera de mantenimiento de equipos. Los cinco primeros ope-radores alcanzaron en 2013 una cuota de mercado conjunta del 71%, mientras que los diez primeros reunieron el 78% del valor del mercado.
El volumen de empleo generado por las empresas del sector se situó en torno a los 20.500 trabajadores en 2013, habiéndose reducido un 2,5% respecto al año anterior. De este modo, por término medio cada empresa empleaba a unas cuarenta personas.
El accionariado de las empresas del sector es mayoritariamente de nacionalidad española, si bien cuatro de los cinco principales operadores están integrados en grupos de capital europeo o estadounidense.