Tras la entrega de despachos a los 45 registradores, el ministro Rafael Catalá destacó el prestigio y calidad que ha consolidado el modelo registral español y mostró su confianza en el cuerpo de registradores “como pieza fundamental no solo de la seguridad jurídica preventiva, sino, en general, en el ámbito de la Administración de Justicia”.
Por su parte, el decano Gonzalo Aguilera advirtió a los nuevos registradores de la importancia de la función de control de legalidad que realiza el cuerpo, pero también de asesoramiento al ciudadano “que busca la protección registral y la seguridad jurídica, a través de la inscripción de los actos más relevantes y cotidianos de su vida civil y mercantil”.