Estos nuevos materiales presentan una gran variedad de funciones capaces de cumplir los estrictos requisitos del Código de Construcción, que serán evaluados en condiciones reales a través de dos demostradores ubicados en el sur y el norte de Europa.
La calidad del aire interior y las emisiones que producen los materiales de construcción han sido durante las últimas décadas un gran reto para la industria, los científicos y los consumidores. En los últimos años se está consolidando una creciente tendencia por reemplazar materiales de construcción (como los ladrillos tradicionales y el mortero) que liberan contaminantes como los COVs, el formaldehido, partículas y fibras, por fachadas multicapa.
Estas fachadas están compuestas por varias capas que proporcionan las propiedades de aislamiento y protección requeridas a las fachadas tradicionales y que normalmente están diseñadas para tener una fachada exterior ventilada y una parte interior formada por paredes de yeso. La pared interior de la fachada consiste en diversos paneles que proporcionan aislamiento, así como protección contra incendios e inundaciones.
El consorcio del proyecto trabaja actualmente en el desarrollo de estos nuevos materiales de construcción eco-innovadores capaces de proporcionar un ambiente interno más saludable, con el fin de obtener una solución integral a los retos actuales de emisiones a los que se enfrenta la industria de la construcción.
Estos innovadores materiales mejorarán la calidad del aire mediante la eliminación de microorganismos, incrementando el aislamiento térmico y acústico y controlando la transpirabilidad de los sistemas de construcción.
Este proyecto de cuatro años está coordinado por Tecnalia en colaboración con Acciona, AIMPLAS, ENAR y VISESA (España); NetComposites (Reino Unido); Fraunhofer, SICC y Tecnaro (Alemania); IVL (Suecia); Conenor y VTT (Finlandia); Omikron (Hungría); UNStudio (Holanda); Bergamo Technologie (Polonia); Collanti Concorde (Italia); y Amorim Cork Composites (Portugal).
El papel de AIMPLAS en el proyecto está relacionado principalmente con la funcionalización del grafeno para su aplicación en resinas termoestables y la adaptación del proceso de pultrusión a la fabricación de perfiles de fibras naturales y bioresinas.
El proyecto ha recibido financiación del Séptimo Programa Marco de la Unión Europea para la investigación, desarrollo tecnológico y demostración en virtud del acuerdo de subvención 609067.