La Norma ISO 14001 es empleada por todo tipo de empresas y entidades, públicas y privadas, de todos los sectores de actividad y tamaños; siendo el medio internacionalmente aceptado para demostrar compromiso con el medio ambiente. En España, más de 16.000 organizaciones que aplican esta Norma deberán adaptarse a los nuevos requisitos en un máximo de tres años, hasta septiembre de 2018. Aenor apoyará a todas las organizaciones certificadas con ISO 14001 que lo soliciten. Para ello, evaluará su grado de cumplimiento de los nuevos requisitos y elaborará un plan de transición. España es el quinto país del mundo y tercero de Europa por número de certificados conforme a ISO 14001.
El principal objetivo de la revisión es facilitar la integración de esta Norma en los demás Sistemas de Gestión –una corriente cada vez más demandada en las empresas– y que éstos sean más accesibles para todo tipo de organizaciones, especialmente del sector servicios. Así, comparte la denominada estructura de alto nivel, común a todas las normas de gestión (como la extendida ISO 9001 de Gestión de la Calidad).
La Norma incorpora nuevos requisitos, como una mayor protección del medio ambiente, mediante la incorporación de prácticas para la prevención de la contaminación y el uso sostenible de los recursos; la consideración de la variable ambiental como un elemento estratégico en la gestión empresarial; el refuerzo del papel de la alta dirección en el liderazgo del sistema de gestión; enfoque al ciclo de vida completo; y una comunicación más efectiva en la que la información sea transparente, veraz, fiable y comprensible.
Las normas se revisan periódicamente para asegurar que se adaptan a las nuevas necesidades de las organizaciones. La revisión del documento se ha llevado a cabo en el seno del Comité Técnico internacional de Normalización de Gestión Ambiental de ISO (ISO/TC 207 SC1).
Las normas técnicas son documentos al alcance de todos, que contienen el consenso del mercado sobre las buenas prácticas a la hora de abordar cuestiones clave para la competitividad de las organizaciones. Elaboradas por primeros expertos, son una herramienta esencial a la hora de abordar un nuevo mercado o proceso.
Las ventajas de un certificado de Gestión Ambiental son numerosas, aunque pueden resumirse en tres: transmite compromiso de forma directa y creíble; se obtienen beneficios económicos por la optimización del consumo de energía y otros recursos y por la optimización de los procesos; y reduce riesgos legales.