Danosa explica que la luz natural directa que proporcionan las claraboyas disminuye las necesidades de consumo eléctrico durante ciertas horas del día. A este respecto, en función de la actividad que se vaya a realizar en el interior de la construcción, las claraboyas pueden evitar el uso de luz artificial.
Para garantizar las ventajas de ahorro y luminosidad que proporcionan las claraboyas y evitar calentamientos excesivos en verano o enfriamiento de los interiores en invierno, es imprescindible un correcto mantenimiento. Danosa recomienda revisarlas, al menos, una vez al año, ya que se trata de un producto expuesto a la intemperie y sujeto a cambios bruscos de temperatura.
Según el responsable técnico de Claraboyas de Danosa, Ignacio Hombrados, “cuando decidimos instalar una claraboya en nuestra vivienda estamos hablando de crear confort dentro de ella. El ambiente creado por la luz natural, dentro de nuestro hogar es más confortable que la luz artificial. Son sensaciones. Pero sin duda uno de los grandes beneficios es la reducción del consumo energético”.