El Túnel de Base de San Gotardo en Suiza tiene 57 km. de largo y cuenta con 152 km de sistemas de galerías excavadas a través de la roca. Sus dos vías se conectan cada 325 m mediante conexiones, abriéndose camino a través de Los Alpes. Cada día pueden transitar por esta obra de ingeniería hasta 260 trenes de carga - con una velocidad máxima de 160 km por hora - y 65 trenes de pasajeros, que pueden alcanzar hasta los 250 km por hora.
La última barrera natural entre el norte y el sur fue finalmente superada el 1 de junio de 2016, día de la apertura oficial del Túnel Base de San Gotardo. Gracias a esta instalación, los trenes podrán desplazarse a través de Los Alpes sin apenas ascender en altura. Se trata realmente de algo único por su técnica de construcción y un hito histórico en el área del transporte y la movilidad.
Atravesando uno de los macizos de Los Alpes más altos, el túnel se extiende unos 2.000 metros bajo la roca y alcanza en su cumbre los 550 m sobre el nivel del mar. Tanto para los trenes pesados de como para los modernos de alta velocidad, esta nueva línea reduce el tiempo de viaje desde Zúrich a Milán en aproximadamente una hora.
A partir de junio de 2016 los pasajeros ya pueden disfrutar de viajes cortos a Italia a través del corazón de la nueva conexión ferroviaria Alptransit . El Túnel de San Gotardo en sí mismo es un testigo de una época en la que el esfuerzo humano ha conseguido construir una infraestructura que no sólo conecta las regiones y ciudades, sino también a los países e incluso a todo el continente europeo.
Se han utilizado alrededor de 20.000 toneladas de aditivos de hormigón en los trabajos de hormigonado. Se ha impermeabilizado el túnel con 3,3 millones de metros cuadrados de membranas Sikaplan, aproximadamente el tamaño de 330 campos de fútbol-. Se han suministrado en la obra en total unas 40.000 toneladas de productos Sika, equivalentes a 1.700 vagones de mercancías.