Los calefactores defectuosos, sobrecargas en la red eléctrica o algunos descuidos como, por ejemplo, apagar mal un cigarro, dejar la sartén en el fuego o dejar encendida una estufa toda la noche son las causas más habituales de los incendios producidos en España durante el año pasado.
De esta manera, 2016 concluyó con un total de 172 fallecidos y más de 125.000 intervenciones de bomberos por incendios o explosiones, un 20% más que las recogidas durante el año anterior, según las estadísticas proporcionadas por la asociación que agrupa las entidades aseguradoras de España, Unespa.
El horario, de noche, y la época del año, mayoritariamente en invierno, también son datos a tener en cuenta a la hora de analizar las causas de los fuegos producidos en domicilios.
Además, la inexistencia de medidas básicas de seguridad, que, en la mayoría de los casos, se encuentran las aseguradoras en el interior de las viviendas provoca la tardía detección y extinción de esos incendios.
Para ello, la empresa Tecnifuego, que agrupa a las empresas que desarrollan los sistemas de seguridad contra incendios, advierte que es necesario guardar ciertas precauciones y medidas para prevenir un incendio, algo que en países como Francia y Portugal es exigido por ley.
Recomendaciones para evitar incendios:
- Las estufas pueden originar un incendio. Manténgalas alejadas, como mínimo un metro, de otros objetos.
- No deje velas encendidas sin vigilancia. Mantenga las cerillas y los encendedores fuera del alcance de los niños.
- Antes de salir de casa o de acostarse, apague todos los aparatos que puedan originar un incendio y cierre las llaves de paso del gas.
- No conecte varios aparatos en un solo enchufe múltiple y mantenga en buen estado la instalación eléctrica.
- No utilice aparatos eléctricos de ningún tipo en mal estado.
- No fume en la cama y no tire las colillas en cualquier sitio.
- Instale detectores de incendios.
- Tenga a mano un extintor de incendio.