El objetivo del barómetro, realizado a 125 empresas españolas, es “establecer el grado de adopción de tecnología en constructoras y promotoras inmobiliarias y detectar las áreas de mejora que permitan abrir nuevos horizontes de competitividad y productividad”, tal y como ha explicado Ibermática.
Entre las cuestiones planteadas a las empresas se encuentra el uso de herramientas para calcular la viabilidad y rentabilidad de sus inversiones, a lo que el 57% contestó afirmativamente. En esta misma línea, el estudio concluyó que el mismo porcentaje de empresas tiene un modelo que le permite calcular el importe y condiciones de cada obra, así como los gastos para la formalización de la financiación de cada proyecto.
Otras de las cuestiones analizadas en el barómetro de este año ha sido la utilización un calendario de certificaciones, necesario para tres de cada cuatro empresas, y el uso de un sistema flexible de estimación de costes, utilizado en más de la mitad de las compañías.
Como conclusión final, Ibermática añade que “las empresas del sector necesitan incorporar herramientas y sistemas que permitan controlar y gestionar sus procesos para mejorar la competitividad y la rentabilidad del sector”.