Esta nueva propuesta hace que España siga permitiendo el uso generalizado de productos y soluciones constructivas s3, es decir, aquellas capaces de generar elevada y rápida opacidad, con la consiguiente dificultad de evacuación. La peor clasificación según la normativa europea de reacción al fuego.
Esta tolerancia es así indistintamente de la altura de los edificios y de la combustibilidad de los materiales y soluciones empleadas. Ya que, aunque existen otras normas que también aceptan la clasificación s3, lo hacen en edificios de baja altura o cuando se usan productos o soluciones que no contribuyen al desarrollo del incendio, A2, o con bajo potencial energético (B). En el resto de casos y países se exige soluciones s2, opacidad media, y s1, escasa y lenta opacidad, menos en Reino Unido, que viene trabajando con una regulación tan permisiva.
La propuesta admite alta combustibilidad , clase D, en los productos para las edificaciones de hasta 18 metros de altura. Para Afelma, la suma de los dos factores, alta opacidad y alta combustibilidad, en el uso de los materiales que se pueden emplear en fachadas de esas alturas, son una quiebra de la seguridad de la edificación y por tanto, los ocupantes del edificio.
La normativa actual permite el uso generalizado de materiales que producen gotas inflamadas en más de 10 segundos, d2, al igual que la regulación del Reino Unido. La propuesta de ahora retrocede al documento de 2010, donde se exigía la no producción de gotas inflamadas, d0, al igual que otros países como Francia, Portugal, Finlandia y Suecia, estos dos últimos aceptan d2 excepcionalmente y con criterios restringidos.
Fomento propone que la clase de reacción al fuego de los materiales y elementos constructivos ocupados por más del 10% de la superficie del acabado exterior de las fachadas sea al menos D-s3,d0, excepto cuando la altura de las fachadas exceda los 18 metros, en ese caso será al menos B-s3,d0.
En cambio, para Afelma, la modificación debería tender a reducir la emisión de humos, situándose en s2, favoreciendo la visibilidad y por tanto, la evacuación. Además, según la asociación, debería reducirse la exigencia de combustibilidad del material empleado a A2 y la propagación del fuego por caída de gotas en d0.