Según el estudio, en 2017, el sector contribuyó con 9.304 millones de euros al PIB nacional, aportando 1.089 millones en fiscalidad neta y exportaciones, 4.564 millones, esto estableció una balanza comercial del sector renovable de +3.117 millones de euros. Los ahorros producidos en el mercado eléctrico, 2.584 millones, fueron bajos por el comportamiento del mercado e inferiores a la retribución regulada percibida, 5.674 millones. El sector generó 78.667 puestos de trabajo y produjo ahorros en importaciones energéticas de 6.951 millones de euros. Esta recuperación en el sector, según Appa, no se debe a la generación energética, ya que la potencia instalada se mantuvo básicamente estancada y la energía vendida disminuyó respecto al ejercicio anterior. Por ello, los motivos de la recuperación vienen de las subastas y la competitividad alcanzada por algunas tecnologías de generación eléctrica.
La baja producción hidráulica obstaculizó la generación eléctrica renovable, que disminuyó un 16,4%. Al no haberse incorporado apenas nueva potencia renovable que pudiera sustituir esta disminución, el porcentaje de renovables sobre energía final bruta descendió hasta el 16,7%, lo que se aleja de los objetivos del 20% para 2020.
Las exportaciones de bienes y servicios del sector renovable establecieron un nuevo récord al situarse en 4.564 millones, lo que arroja un saldo neto exportador de 3.117 millones de euros. Esta balanza comercial renovable contrasta con el déficit comercial del conjunto de la economía, -22.694 millones, del cual el déficit energético supone el 85%, -19.269 millones. Las energías renovables en sus distintos ámbitos, generación eléctrica, energía térmica y biocarburantes, evitaron en 2017 la importación de 20.068.185 millones de toneladas equivalentes de petróleo, un ahorro equivalente a 6.951 millones de euros. Las emisiones evitadas alcanzaron las 56.850.744 toneladas de CO2, valoradas en 332 millones de euros.