La cubierta, como parte de la envolvente del edificio, es responsable de su eficiencia y ahorro energético, más del 30% de la energía de una vivienda se llega a perder por el tejado. Además, un aislamiento inadecuado puede generar problemas de humedad, manchas de moho y pérdidas de temperatura en el interior. En 2018, el sector ha ofrecido soluciones para poder hacer frente a las nuevas demandas en construcción, cumpliendo con los requerimientos de CTE y la normativa vigente.
Entre ellas, estas son cinco tendencias que seguirán en pie en 2019. Por una parte, las cubiertas microventiladas de teja cerámica, caracterizadas por la sustitución de las pastas y morteros para su fijación por clavos, tornillos etc., amortiguando los cambios de temperatura y reduciendo el riesgo de aparición de condensaciones. Otras opciones son las cubiertas para cumplir con el estándar Passivhaus y eficiencia energética o los sistemas completos para construir tejados. Estos últimos son soluciones que garantizan la funcionalidad, resistencia y durabilidad del elemento instalado. También las cubiertas ecológicas, denominadas cubiertas ajardinadas, que ayudan a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de calefacción. Por último, la integración paisajística de colores, que aunque parezca una cuestión meramente estética, contribuye al medio ambiente.