"La mala noticia es la falta de mano de obra no que haya mucha actividad". Con esta frase resumen desde la Asociación de Constructores de Pontevedra (ACP) la peculiar situación que vive el sector en Vigo y su área, tan favorable por el elevado número de proyectos en ejecución públicos y privados como preocupante ante la incapacidad de asumirlos todos por la acuciante escasez de personal. No hay suficientes albañiles, sobre todo, pero tampoco sobran electricistas, fontaneros, y el resto de ese cuerpo de operarios que participan en la instalación de las edificaciones, reformas y acondicionamientos.
Desde la patronal provincial descartan cualquier atisbo de exageración en la radiografía del gremio en el área viguesa realizada a petición de FARO por la Fundación Laboral de la Construcción que estima en 900 nuevos trabajadores los que se necesitarán este 2019. En la actualidad ya hay 120 ofertas vigentes que las empresas se ven incapaces de cubrir. En consecuencia, algunas renuncian a contratos o hasta agradecen que la administración o el promotor posponga su arranque.
Si ahora el problema de falta de personal comienza a preocupar será aun peor debido a que muchos de estos trabajadores están a las puertas de jubilarse. Se trata de un sector muy envejecido que dejó de ser atractivo para la gente joven y abandonado por otros muchos que cuando la crisis de 2007 desplomó la actividad acabaron por recolocarse en otros gremios. En la patronal provincial temen que se tardará en revertir esta coyuntura.
Antes creen que hará falta mucha formación y dignificación de un sector -"con futuro, de rápida progresión profesional y con condiciones laborales y salariales muy mejoradas- y junto a los sindicatos tratar de convencer a las administraciones de su importancia económica y en especial como fuente generadora de empleo para que atienda sus principales demandas: potenciar la Formación Profesional (FP) y los módulos formativos de construcción.
Formada por la CNC (Confederación Nacional de la Construcción) y los sindicatos UGT y Comisiones Obreras, la Fundación Laboral de la Construcción nutre sus informes con los datos reportados por las empresas a los 17 consejos autonómicos -uno por cada autonomía- integrados a su vez por delegados de los citados sindicatos y de las patronales provinciales. El análisis vigués confeccionado para este periódico prevé que la tasa de crecimiento de la ocupación en el sector en Galicia, donde el año pasado se situó en un 3%, se aproxime en el presente ejercicio a la de la media nacional, de un 7,4%. Y de ser así prevén que en el área de Vigo "se necesitarán 407 nuevos trabajadores".
Pero a estas plazas habrá que sumar aquellas que quedarán libres este 2019 por jubilaciones. Basándose en las cifras que revelan el envejecimiento de la plantilla actual del sector gallego, donde un 17,76% tiene más de 55 años y menos de 35 solo el 15,55%, el informe concluye que la reposición de puestos de jubilados rozará el medio millar, "por lo que nos podemos encontrar que en Vigo se necesiten en torno a 900 nuevos trabajadores" en el presente ejercicio.
Ni siquiera habrá que esperar a cerrar el año para comprobar la dificultad de encontrar trabajadores "porque ya lo están sufriendo las empresas", como recalcan desde la asociación provincial. El informe de la fundación revela que en estos momentos en el área metropolitana viguesa hay más de 120 puestos sin cubrir, de los cuales 72 "ofertas vigentes" están relacionadas con la albañilería. Y del total "solo 27 son para personal con baja cualificación", subrayan.
Fuente: SICO, Salón del Interiorismo y la Construcción