Los inodoros tradicionales incorporan un aro o brida por el cual descarga el agua de la cisterna en el interior de la taza. Un obstáculo que desde siempre ha dificultado la limpieza en el baño, fomentando la acumulación de suciedad, cal y bacterias, y la formación de gérmenes.
La apuesta constante por conseguir desarrollos que contribuyan a alcanzar una higiene fácil y eficaz, nos llevan a buscar diseños que superen estas preocupaciones y aporten una mayor seguridad.
Rimless NK-Clean sustituye este diseño por uno sin obstáculos al eliminar este aro o brida que dificulta la circulación del agua. Inodoros que incorporan una pared totalmente plana y uniforme, sin ángulos ni recovecos, más accesible, que mejora la limpieza de la pieza y distribuye el agua en un recorrido circular que llega incluso más arriba y sin generar salpicaduras.
Rimless NK-Clean dispone de un sistema de expulsión de agua que realiza una descarga simétrica para ambos lados de las paredes. Hace que el agua entre con fuerza en el inodoro y realice un recorrido 360º, llegando incluso a los ángulos más altos de la taza, y además sin provocar salpicaduras, un tradicional problema para estos sistemas sin aro que ha sido solucionado gracias a la continua apuesta por el I+D+i.