El proyecto consiste en fomentar la recuperación y transformación de contenedores marítimos abandonados en las costas de Túnez, en viviendas y equipamientos sociales, mediante criterios de sostenibilidad.
Esta iniciativa de reciclaje, es también un proyecto ecológico orientado a la economía social y solidaria. Los edificios se han proyectado con los criterios de arquitectura bioclimática y dan respuesta a las demandas vigentes de eficiencia energética.
Para el director del proyecto y profesor del Instituto Provençana, Paco Sánchez, “entre nuestros objetivos está la vertiente educativa de trabajar con proyectos reales para que los alumnos tengan una mejor experiencia de aprendizaje, además, de la faceta solidaria de crear vivienda social y exportar la experiencia a otros países y contamos con un aspecto medioambiental sobre cómo investigar y profundizar en la eficiencia energética de los edificios”.
La empresa donará el material necesario para la construcción de fachadas ventiladas en estos contenedores con los que se diseñarán viviendas sociales y otros equipamientos como ludotecas, centros sociales o coworkings. El alto grado de aislamiento térmico y acústico se sumará a otras medidas de eficiencia energética como la cubierta ajardinada o el uso de energía solar.
El trabajo se ha incorporado a una iniciativa de inter-cooperación mediterránea a través de la cooperativa europea Iesmed (Innovación y Economía Social en la Mediterránea).