Si bien la media de ingresos crece un 5% hasta los 1.462 billones de dólares facturados, el rendimiento financiero de las 100 principales empresas de construcción fue desigual en 2019: más de la mitad de las organizaciones registraron un aumento en las ventas y 10 compañías lograron un incremento de dos dígitos; por otra parte, 13 empresas informaron de una reducción de los ingresos superior al 10%. Respecto a la evolución de la rentabilidad, los márgenes de la actividad de construcción se mantienen relativamente constantes en entornos cercanos al 5%.
En cuanto a la clasificación por capitalización de mercado, las empresas europeas lideran, con un 36% del total, la presencia en el Top 100. Tras ellas, se encuentran las firmas chinas (18%), estadounidenses (16%) y japonesas (16%).
Además, el informe pone de manifiesto que muchas compañías del sector de la construcción están diversificando su cartera de servicios empresariales para lograr un crecimiento sostenible y aumentar los márgenes de los proyectos de construcción. En 2019, los ingresos no procedentes de la construcción obtenidos por las principales organizaciones de los Estados Unidos, Europa y Asia alcanzaron el 36%, el 21% y el 18%, respectivamente, del total.
Por otro lado, las oportunidades de crecimiento a nivel internacional siguen siendo una prioridad estratégica de los grupos de construcción. Los 100 primeros obtuvieron alrededor del 19% de los ingresos totales fuera de sus respectivos mercados nacionales. Las empresas con mayor penetración internacional son los grupos europeos, seguidos por los de los Estados Unidos, si bien es destacable la creciente la presencia internacional de los principales grupos chinos.
España, en el ranking de ventas
Seis compañías españolas aparecen en el listado de las 100 empresas de construcción que más vendieron durante el año 2019, alcanzando 73.544 millones de dólares de facturación en conjunto. Esta cifra representa el 5% del total de ventas a nivel global en la industria y consolida a España entre los países con mayor cuota de mercado, compartiendo ahora el quinto puesto con Corea del Sur, y solo por detrás de China, Japón, EE.UU. y Francia.
La posición de las compañías españolas en la clasificación la lidera Actividades de Construcción y Servicios (ACS), que se ubica en el séptimo lugar, tras cinco firmas chinas y una francesa. Acciona, por su parte, se encuentra en la posición número 38. Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) se sitúa en la 46. Ferrovial se ubica en la 47. Sacyr se mantiene en el puesto 58. Por último, OHL se encuentra en el número 74 de la clasificación.
Previsiones para 2020
El estudio señala que la estimación actual de crecimiento de la industria de la construcción en 2020 se reducirá al 0,5%, dependiendo de cada región. En los países emergentes, se espera una disminución del 2% en el presente año y un crecimiento del 5% en 2021. Las economías avanzadas podrían experimentar una contracción del 1,5% en 2020, seguida de una leve subida del 2% en 2021.
"A corto plazo, puede ocurrir que la inversión en infraestructuras se vea afectada en algunas economías emergentes -como Latinoamérica- o desarrolladas -como el sur de Europa-, debido al impacto de la crisis de la COVID-19 en los presupuestos de la Administraciones Públicas. La principal medida para afrontar la previsible reducción de la inversión pública es fomentar la colaboración del sector privado en la financiación de proyectos de infraestructura pública", explica Javier Parada.
Tendencias que reconvertirán el sector
El informe también señala las principales tendencias de la industria de la construcción, considerada como el sector con la productividad más baja en los últimos 30 años. Estas palancas buscan revertir esta situación en un futuro cercano:
- Innovación: Las empresas líderes del sector ya están invirtiendo de forma relevante en la aplicación de nuevas tecnologías digitales, técnicas de análisis de datos, robotización, drones, “wearables”, inteligencia artificial o gestión documental, que van a tener un impacto significativo en la productividad.
- Eficiencia en las operaciones: La ganancia en eficiencia operacional tiene que venir de la mano de una mejora en el control de los riesgos de los procesos de licitación y en asegurar una adecuada distribución de los riesgos entre cliente y constructor, aspectos clave para que los proyectos tengan una adecuada rentabilidad. Para mejorar los márgenes de las empresas del sector también es esencial ser proactivos en la gestión de los proyectos y lograr mejoras en la integración y gestión de la cadena de suministros y en la simplificación y digitalización de los procesos constructivos y de soporte.