La herramienta ha sido desarrollada bajo la metodología PIM (Prescription Information Modeling), permitiendo elegir la solución cerámica en base a su composición, sus prestaciones técnicas (térmicas, acústicas, de resistencia al fuego, etc.) y las condiciones necesarias para cumplir las exigencias del CTE.
El uso de la metodología BIM para el desarrollo y gestión de los proyectos de edificación “es hoy en día una realidad en muchos estudios de arquitectura y empresas constructoras”, señalan desde la Asociación. Su forma de trabajo colaborativa, referenciándose todos los agentes a un mismo modelo arquitectónico, “conlleva una mejora de la calidad del proyecto, así como una optimización de tiempo y costes en todo el proceso constructivo”.
En palabras de El presidente de la Subsección de Gran Formato de Hispalyt, Juan Carlos Millas, asegura que Los meses a los que nos hemos enfrentado “han modificado los hábitos y demandas que tenemos como habitantes de edificios. Aspectos como la salubridad y el aislamiento de nuestras viviendas u oficinas tienen ahora más valor si cabe que antes de que comenzara esta crisis sanitaria. El objetivo con este anuncio es facilitar el trabajo de aquellos arquitectos que utilizan nuestro sistema y que cada vez van a ser más debido a estas nuevas demandas y prioridades que tenemos como usuarios de espacios interiores”.