La iniciativa tiene un doble objetivo. “Por un lado, el aprovechamiento energético y la reducción de emisiones de CO2 mediante el desarrollo de un sistema de uso acoplado de hidrógeno verde y bomba de calor que se implementará en un horno de la fábrica de Porcelanosa en Vila-real”, informan. Una solución que busca optimizar la energía térmica residual sustituyendo hasta la mitad del gas natural como combustible por hidrógeno verde.
“El proyecto integral contempla la incorporación en las instalaciones de Porcelanosa de un electrolizador, alimentado por una planta fotovoltaica para la producción de hidrógeno verde. También se incluirá una estructura tecnológica que aprovechará el exceso de calor residual y de las líneas de producción mediante sistemas de alta eficiencia”, explican.
Con esta modificación del sistema de combustión, Porcelanosa busca integrar la generación de hidrógeno verde con el uso eficiente de la bomba de calor para reducir 2.351 toneladas de CO2 eq/año y disminuir el impacto energético derivado de su actividad industrial cumpliendo así con los Objetivos de Descarbonización fijados por la Unión Europea.
La solución innovadora, la primera que se realiza en este ámbito en la industria cerámica, muestra el camino para la descarbonización de este sector, así como del resto de industrias intensivas en el uso de energía térmica que, en la actualidad, proviene del uso de los combustibles fósiles.