El jurado ha valorado “la conexión e implicación de la universidad y la empresa privada que permite llevar a cabo actividades de formación, investigación y desarrollo o transferencia de conocimientos en áreas de interés común”. En este sentido, las líneas de investigación se centran en el comportamiento mecánico de hormigones, sistemas de anclaje para refuerzos superficiales, comportamiento de morteros, eficacia de los inhibidores de corrosión de armadura e influencia de la disposición de anclajes de fibra de carbono.
La Cátedra Sika es un convenio con la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) que desde hace años cumple con los principales objetivos de acercar el mundo de la química aplicada a la construcción a los estudiantes. De esta manera, y a través de la investigación, los alumnos de la UPM pueden profundizar en la innovación de los materiales constructivos en sus diferentes campos de aplicación (reparación y refuerzo de hormigón, impermeabilización, etc.).
“Para una compañía como Sika, comprometida con la innovación y la sostenibilidad, es un privilegio ser reconocida por su aportación al ámbito universitario, de donde saldrán los futuros profesionales, con una mayor cualificación en campos tan importantes como la industrialización y la rehabilitación energética”, ha manifestado Gonzalo Causin, director general de Sika, durante la entrega de los Premios, que tuvo lugar el pasado viernes en la Real Casa de Correos de Madrid.
Para Causin, “los nuevos conocimientos que adquieren los estudiantes de la `Cátedra Universidad-Empresa Sika-UPM sobre Especialidades Químicas en Construcción´ contribuirán a crear la base científica en la que se apoyará el futuro de la construcción, más especializada”.