El proyecto simula la construcción de un edificio de 65 viviendas destinadas al alquiler. Con el fin de dotarlo de la máxima sostenibilidad, para su ejecución se han tenido en cuenta todas las tecnologías y materiales sostenibles para conseguir la mayor eficiencia energética, reducción de residuos, recuperación de aguas y descarbonización posibles.
“Se pretende que este edificio de referencia, completamente digitalizado, sea un modelo replicable para la construcción industrializada en España y con un coste de ejecución también sostenible y asumible por las empresas constructoras”, explican desde la empresa.
“Sika cuenta con sistemas y soluciones encaminadas a reducir al máximo el consumo y las emisiones contaminantes de un edificio a lo largo de toda su vida útil”. Para Elena Alenar, Key Owner & Specification Manager y representante de Sika en EPTS, “participar en este tipo de proyectos nos ayuda a conocer de forma más exacta cómo nuestros materiales ayudan a que un edificio sea sostenible. Mucho más en este caso en el que no se persigue una certificación, sino un modelo real de sostenibilidad vigente durante toda su vida útil”.
Los parámetros de partida analizan la fase de diseño con la elección de los materiales y sistemas más adecuados y eficientes en su proceso de fabricación y reutilización o reciclaje tras el final de su vida útil para generar la menor cantidad de residuos.
Pero, además, se tendrán en cuenta otros factores como la reducción del consumo de agua y la recuperación de la energía, la eficiencia de consumo todas las instalaciones que formen parte del edificio simulado y la gestión y monitorización durante la fase de uso para una explotación y un mantenimiento eficiente.
“Como siempre decimos en SIKA, y este proyecto lo ha entendido muy bien, no se trata de crear materiales pensando solo en su instalación. La industria debe contemplar todo el ciclo de vida de los materiales instalados y cómo se van a comportar durante la fase de uso del edificio. Su rendimiento a lo largo de los años será crucial para un buen comportamiento energético del edificio”, asegura Alenar.
Desde el Clúster de la Edificación añaden que “la utilización de Metodología BIM ha posibilitado la integración transversal, y desde el inicio del trabajo colaborativo y los conocimientos de todos los agentes involucrados en el proyecto (diseño, construcción mantenimiento y explotación, uso) con el objetivo de definir un modelo de Edificio Tecnológico Sostenible, ajustándose a precios de construcción de mercado”, finaliza Miguel Pinto, director gerente del Clúster.