Previsión
La constructora Alza, con 32 obras en curso y 9 nuevas adjudicaciones en el primer semestre, cuenta con una previsión de facturación anual de 100 millones €. Unas cifras de negocio que evidencian el buen estado de salud de la empresa, alcanzando los 200 millones € de cartera y representando unos datos favorables en la inversión nacional.
Según Bankinter, esos datos se estabilizarán en 100.000 viviendas construidas al año para 2023, prediciendo una subida del 1% en los precios. Por su parte, el Banco de España estima que en lo que queda de año las viviendas iniciadas y terminadas subirán un 26% y un 13% respectivamente comparando con datos del 2021. Actualmente, más del 90% de las viviendas en alquiler están en manos de particulares, que en muchas ocasiones no son capaces de responder a las nuevas demandas de vivienda. En este sentido, la gestión profesionalizada puede cobrar mucha importancia.
Todo esto, se sitúa en un entorno lleno de oportunidades donde los procesos de negociación abiertos hacen pensar que el segundo semestre podría ser igual de prometedor que el primero. Además, es importante recordar que en 2021 las inversiones crecieron un 30%, dejando atrás grandes picos como el de 2019.