Las ayudas para la renovación del parque arquitectónico en España llegan desde diferentes ámbitos y la propuesta de la Unión Europea es el más suculento y el que marcará la agenda futura. Su objetivo es integral, pues tiene en cuenta muchos de los posibles cambios que se pueden realizar en una casa. La mejora del aislamiento y carpintería, enfocada tanto en fachadas como en las cubiertas, los cambios de ventanas o la retirada de amianto son soluciones que se engloban en este programa englobadas en este programa y que buscan reparar problemas tradicionales. Otras cuestiones más recientes, como la instalación de placas solares, la digitalización, la accesibilidad o la ampliación de las zonas verdes son propuestas enfocadas al paradigma actual y que también se contemplan en las ayudas. El objetivo, además, mira fuera del perímetro residencial, ya que incluye la reurbanización y mejora del entorno de los barrios, como una actuación más amplia y consensuada con el Gobierno local.
El amplio abanico de intervenciones se traduce en cinco programas de subvenciones que se diferencian por el escenario de la actuación. El barrio, la creación de oficinas dirigidas hacia las acciones energéticas globales, la rehabilitación de edificios, la mejora energética en la vivienda y la elaboración del libro del edificio o los proyectos son los campos contemplados.
Ayuda a las actuaciones a nivel de edificio
La premisa de esta línea es mejorar la eficiencia energética en áreas residenciales, con un especial hincapié en las fachadas y las cubiertas, que son puntos clave para reducir la influencia de las condiciones del exterior, ya sea frío o calor, en la climatización interior. El objetivo de este programa tiene cifras concretas, que son reducir en un mínimo del treinta por ciento el consumo de energía primaria no renovable y de un veinticinco por ciento en el caso de la demanda de energía destinada a la calefacción y la refrigeración. El primer número también marca un requisito para conseguir la ayuda. Ésta se solicita a través de los canales abiertos por cada Comunidad Autónoma y está enfocado a propietarios, comunidades, arrendatarios y arrendadores. Si la actuación está realizada por varios actores, la ayuda se divide en función del trabajo de cada uno de ellos. La cuantía obtenida depende del ahorro conseguido y del tipo de espacio rehabilitado.
Mejora de eficiencia energética en la vivienda
Marca otra de las líneas de actuación de este programa de subvenciones para rehabilitar edificios. Los objetivos, en este caso, son reducir en un siete por ciento la demanda energética de calefacción y refrigeración, reducir el consumo de energía primaria no renovable en un treinta por ciento y sustituir componentes instalados en la fachada, como las ventanas. Es una intervención propia de una vivienda, así que los destinatarios de esta subvención son los propietarios, usufructuarios y arrendatarios. Este programa también se gestiona a través de la administración autonómica y su funcionamiento es muy simple: el dinero se entrega por orden de presentación hasta el agotamiento de la totalidad de los fondos destinados. La cuantía entregada es el cuarenta por ciento del coste de la reforma, con un máximo de 3.000 euros por vivienda. El mínimo subvencionable es mil euros.
Alquiler social en edificios con eficiencia energética
Este programa tiene una particularidad y es que está enfocado hacia el alquiler de viviendas a un precio económico, siempre y cuando estas cumplan con unos criterios mínimos de eficiencia energética. Es una subvención dirigida a empresas públicas y privadas que inviertan en la construcción o rehabilitación de edificios para la puesta en alquiler de sus viviendas. Contempla tanto la nueva edificación como la rehabilitación de edificios que no estaban destinados a motivos residenciales. El objetivo de este programa es financiar la adaptación energética a veinte mil viviendas en España.
El capital destinado a esta intervención es de mil millones de euros, que son distribuidos por las Comunidades Autónomas y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Organizado en diferentes fases, el plazo para finalizar las actuaciones es el 30 de junio de 2026, por lo que las empresas interesadas disponen de un amplio periodo de tiempo para optar a la subvención. Esta línea completa un programa muy potente que pretende marcar el camino para el cambio energético en el parque de vivienda en España.