No obstante, es hora de ir un paso más allá. Urge la necesidad de dotar de importancia a la integración arquitectónica de los sistemas fotovoltaicos en los edificios. Es por ello que en este texto abordamos las ventajas de esta visión energética y estructural junto a algunas de las opciones y posibilidades disponibles a nuestra disposición.
Instalaciones fotovoltaicas, diseño y arquitectura
Cuando hablamos de placas solares solemos asociar dicho concepto solo al ahorro energético. Olvidándonos, en no pocos casos, de la importancia de adecuar dichos elementos de forma correcta, estructural y arquitectónicamente hablando, a nuestra vivienda. Todo ello con el fin de lograr dicho ahorro de una forma realmente eficiente. Y para lograrlo debemos adoptar una visión que fusione diseño e instalación. Entendiendo las placas solares, y todos sus componentes asociados, como materiales de construcción a incorporar, desde un principio, al proyecto arquitectónico en su conjunto.
Y si una buena integración arquitectónica de los sistemas fotovoltaicos en los edificios resulta crucial, adoptar los criterios adecuados para lograrlo no lo es menos. ¿Nuestras recomendaciones? Integrar dichos elementos desde el inicio mismo del diseño del edificio en cuestión. ¿No es posible? Toca intentar incorporarlos a espacios en los que sustituyan elementos prescindibles de la propia fachada o cubierta. Algo que, afortunadamente, ha desembocado en la proliferación de módulos solares preparados para facilitar dicho proceso de fusión e incorporación a la estructura de acogida. Todo ello, como os podéis imaginar, teniendo siempre en cuenta la orientación y las recomendaciones y requerimientos de cada elemento.
Opciones para la integración arquitectónica
Llegados a este punto, probablemente muchos estéis interesados en conocer que tipo de opciones, reales y prácticas, existen para promover la integración arquitectónica de las placas solares. Pues son muchas y variadas:
- Parasoles y cubiertas. Se trata de elementos que cumplen una doble función. Dar sombra y servir de soporte de las propias placas solares. ¿Su principal inconveniente? Sobresalen del edificio.
- Muros cortina. En este caso nos referimos a un popular sistema de revestimiento de fachadas, no estructural y por paneles, que aporta eficiencia y versatilidad. Al poder servir de espacio sobre el que colocar las placas solares. Sus principales inconvenientes van ligados a su propio balanceo, humedades o a las propias inclemencias climatológicas.
- Fachadas ventiladas. La fachada ventilada es una de las mejores opciones para la colocación de placas fotovoltaicas. Y es que, además del consiguiente ahorro energético, se trata de una solución que aísla tanto térmica como acústicamente hablando. Como principal inconveniente encontramos la complejidad de la instalación y su encarecimiento con respecto a otras alternativas.
Para finalizar, parece claro afirmar la imperiosa necesidad de ir un paso más allá a la hora de instalar sistemas fotovoltaicos. Apostando por soluciones y módulos que no se superpongan y que se integren de forma armoniosa y sobre todo eficiente. Conclusión, en nuestras manos queda apostar por esta nueva forma de entender el autoconsumo como una extensión más del diseño y estructura de nuestros hogares.