Los ensayos se realizan acorde a la normativa específica que marca el Código Técnico de la Edificación (CTE) para garantizar la seguridad a los usuarios finales y ofrecer una mayor certidumbre a los profesionales.
Este espacio innovador cuenta con las siguientes características singulares que lo diferencian de otros que pueda haber dentro de la industria específico para barandillas:
- Climatización. Uno de los principales aspectos reseñables de este laboratorio es que está climatizado, esto permite realizar ensayos a una temperatura controlada durante todo el año. La climatización es especialmente importante para ciertos vidrios laminados que varían sus propiedades en función de la temperatura.
- Ensayos para normativas nacionales e internacionales. El laboratorio está equipado y preparado con todo lo necesario para la realización de ensayos de barandillas bajo normativas nacionales e internacionales (España, Francia, Italia, Noruega, Suecia…) y, para diferentes categorías de uso (privado, público y aglomeraciones) con ensayos de carga estática y ensayos de impacto dinámico de cuerpo duro, cuerpo semi-rígido y cuerpo blando.
- Colaboración con certificadoras externas. Comenza colabora estrechamente con las empresas internacionales de certificación más prestigiosas (CSTB, Applus, SINTEF, TÜV, etc.) en la realización de ensayos y certificación de los sistemas. Recientemente, la certificadora alemana TÜV Rheinland, reconocida a nivel mundial, ha visitado este nuevo laboratorio y certificado los sistemas de perfiles y pinzas de Comenza para las normativas de Italia y Suecia. De esta forma, la empresa garantiza que sus sistemas de barandillas se adaptan y cumplen con las especificaciones de las legislaciones de edificación de cada país en el que se comercializan.
Todos los sistemas de barandillas de Comenza se ensayan según los requisitos del CTE para definir las características de su composición. Esto es, la base o soporte, el vidrio, el anclaje y el pasamanos. Y todo ello verificando que superan los ensayos de carga aplicando el coeficiente parcial de seguridad de 1,5 que marca la normativa.
“A pesar del desconocimiento del público general y de una parte importante del sector”, explica Marta Rois, Directora de Ingeniería y Calidad de Comenza, “el CTE exige la verificación de resistencia de las barandillas mediante la comprobación del estado límite último (ELU), es decir, aplicando el coeficiente parcial de seguridad establecido para las acciones de tipo variable, como son las acciones sobre las barandillas. Todos nuestros sistemas son ensayados cumpliendo este requisito y es muy importante subrayar que sin él no es posible garantizar el cumplimiento normativo de una barandilla”. Según se especifica en el CTE, la fuerza horizontal característica que se establece según la categoría de uso en la que se instale la barandilla ha de multiplicarse por el coeficiente parcial de seguridad indicado en el CTE de 1,5.