En su intervención el secretario general de Agenda Urbana, Vivienda y Arquitectura, Iñaqui Carnicero, ha querido destacar el firme apoyo y compromiso del Gobierno de España con la creación y puesta en marcha de “un centro nacional de industrialización y robotización”, promovido entre el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana y el Gobierno de Navarra, para que “aprovechando la amplia experiencia y especialización ya existente en el conjunto del ámbito empresarial navarro, este centro se convierta en un modelo que impulse la transformación hacía la industrialización del sector de la construcción en todo el país”.
Así, ha manifestado que será un espacio puntero y de referencia a nivel internacional, que contará para ello con la colaboración tanto de instituciones nacionales como extranjeras que aportarán “talento y conocimiento especializado mejorando de este modo la eficiencia y calidad en los procesos productivos”.
Para lograr estos fines, la fundación llevará a cabo actividades encaminadas a lograr el objetivo de la creación y puesta en marcha de un centro de referencia nacional en Navarra, el desarrollo de proyectos de I+D+i en el sector de la construcción, la redacción de proyectos piloto para la aplicación directa de la investigación aplicada, así como la participación en colaboraciones nacionales e internacionales y la impartición de formación especializada, entre otros.
Asimismo, durante la jornada, el secretario general también ha visitado algunas de las principales compañías de referencia del sector de la construcción de la región como es la empresa Viguetas Navarra en Barásoain, reconocida por sus instalaciones robotizadas únicas y su apuesta por procesos de producción industrializados a través de la I+D+i para desarrollar soluciones técnicas innovadoras.
Además, se ha desplazado hasta la localidad de Mutilva para recorrer las obras de las 39 viviendas industrializadas, destinadas a alquiler público. Una promoción que destaca por su apuesta estratégica por el uso de la madera con funciones estructurales, convirtiéndose en el segundo edificio residencial de Navarra construido en madera en altura.