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Otras zonas comunes también reciben atención, como los suelos (28%), balcones y terrazas (27%), portales, escaleras y cubiertas. Por otro lado, elementos como jardines, ascensores o piscinas se reforman con menor frecuencia, debido a que requieren mantenimiento más continuo o son menos comunes en ciertas tipologías de vivienda.
El interés por la rehabilitación es significativo: sumando las reformas en viviendas habituales y zonas comunes, 3 de cada 4 personas ha realizado o planea realizar mejoras para incrementar el confort, la eficiencia energética y la habitabilidad de su hogar.
Soluciones eficientes: sistemas Sate para fachadas
Una de las opciones destacadas para mejorar las fachadas son los sistemas Sate de Saint-Gobain Weber. Estos sistemas de aislamiento térmico por el exterior permiten renovar la estética del edificio, optimizar el aislamiento térmico y acústico, y reducir el consumo energético.
Entre las soluciones más avanzadas se encuentra el Webertherm Robusto, que combina eficiencia energética con versatilidad estética:
- Admite acabados decorativos variados, como cerámica, piedra o mortero de cal.
- Mejora el rendimiento térmico y acústico.
- Reduce el consumo energético y maximiza el ahorro en los edificios.
“Este Barómetro recoge una realidad que estamos observando en el mercado y que demuestra que las fachadas se han convertido en un foco prioritario por su impacto en la eficiencia energética de los hogares”, explica Hanan Akhrif, responsable de Fachadas de Saint-Gobain.
Un sector en transformación
El Barómetro Saint-Gobain sobre los Hogares 2024 refleja el creciente interés por mantener y rehabilitar zonas comunes en viviendas colectivas, priorizando elementos clave como fachadas y patios interiores. Además de mejorar la apariencia de los edificios, estas reformas contribuyen significativamente a la sostenibilidad y eficiencia energética, alineándose con las demandas actuales del mercado y los objetivos de habitabilidad y confort de los residentes.
