El aspecto más conocido de esta norma es la clasificación que establece en función del lugar de instalación y la resistencia que se debe exigir. Sin embargo, fija otro tipo de especificaciones y limitaciones que, siendo adecuadas para un dispositivo que se va instalar en el exterior, pueden ser contraproducentes para una tapa que se colocará en el interior de un edificio. “Por ello, no es de sorprender que los fabricantes de tapas de acceso para interiores hayan descartado esta norma y las hayan diseñado siguiendo sus propios criterios”, afirman desde Maco. La Norma EN 1253 viene a paliar estas deficiencias. Clasifica los sumideros y sifones, marca directrices respecto a los lugares de instalación y especifica los requisitos para su diseño y fabricación, independientemente del material que se utilice para su producción. De manera específica, la cuarta parte de esta norma hace referencia a las tapas de acceso. En concreto, regula dos aspectos fundamentales: la resistencia que deben soportar según sea su lugar de instalación y el nivel de estanquidad. Además, establece los ensayos que se deben realizar y fija las pautas para el marcado de los productos. En lo relativo a la resistencia establece la siguiente clasificación:
• Clase H 1,5: cubiertas planas no utilizadas, tales como cubiertas con recubrimiento de fieltro y grava, cubiertas rellenas de grava y similares.
• Clase K 3: zonas sin tráfico de vehículos, tales como cuartos de baño o duchas de carácter público, balcones, galerías, terrazas y cubiertas con vegetación.
• Clase L 15: zonas con tráfico de vehículos ligeros, excluidas las carretillas elevadoras de horquilla, utilizadas en recintos comerciales.
• Clase M 125: zonas con tráfico de vehículos, tales como aparcamientos, fábricas y talleres.
En zonas en las que las tapas se vean sometidas a esfuerzos especiales, como recintos de exposición, mercados, cobertizos de fábricas y hangares de aviones, se emplearán las clases C 250 a F 900 de la Norma EN 124. En cuanto a la estanquidad las agrupa en estas clases:
• Clase Wt: estanquidad al agua. Las tapas deben impedir la entrada de agua de lluvia que no ejerza presión hidrostática.
• Clase Ot: estanquidad a los olores. Las tapas deben impedir la salida de aire viciado.
• Clase Bt: estanquidad al reflujo. En caso de sobrecarga del sistema de drenaje, las tapas deben impedir la salida de agua para una presión de 0,5 bares. En definitiva, la instalación en edificios de tapas de arquetas que cumplan con los requisitos de la Norma EN 1253 asegurará el confort a sus ocupantes y dotará de seguridad a quienes las prescriban e instalen.
Maco