“Fdu consigue reducir el calentamiento del hormigón fresco, una fase que requiere un gran consumo de energía”, explica la compañía, que añade que reduce el gasto energético de la producción hasta en un 15% en función del emplazamiento, lo cual se traduce a su vez en un descenso de las emisiones de CO2.
«Los encofrados para los prefabricados de hormigón normalmente deben permanecer doce horas en la cámara de calor para que fragüen, pero al utilizar Master X-Seed pudimos reducir a la mitad el tiempo de fraguado. Los prefabricados pueden desencofrarse antes y suministrarse a las obras con mucha más rapidez”, explicó Thomas Beike, gerente de Fdu Betonwerke.