La principal de estas características es que es un material completamente reciclado y reciclable. Puede volver a pasar por la línea de producción tantas veces como sea posible y, en su composición, ya se llega hasta el 100% de material reciclado, procedente, en su mayoría, de la industria agroalimentaria. También el CO2 con el que se completa el proceso de extrusión es 100% reciclado.
“Tenemos una gama de productos de la que podemos presumir”, asegura el director general de Ursa, Ramón Ros, “el XPS es un material con cientos de miles de usos a lo largo de su vida útil, tantos como pasa tras una fachada o bajo una cubierta aislando, ahorrando energía y aportando confort”.
Además de ser reciclado y reciclable, Ursa XPS puede aprovecharse completamente sin generar ningún residuo y tantas veces como sea necesario. Es una forma más de contribuir a la economía circular ya que el material puede pasar por la línea de producción tantas veces como sea necesario.
Todas estas ventajas se suman a su capacidad de ahorrar, a lo largo de toda su vida como aislante de edificios, muchísima más energía que la empleada en su fabricación, envasado, almacenaje, transporte, instalación y fase de uso.