El sistema de ventilación con recuperador entálpico transfiere la humedad del aire de extracción al aire de impulsión. En invierno, evita que el ambiente interior se reseque, y en verano, reduce la humedad del aire entrante, manteniendo una humedad óptima del 40-60%. Este proceso permite mantener un ambiente confortable durante todo el año.
Fabricados con materiales poliméricos especiales, los recuperadores entálpicos permiten la transferencia de calor y humedad sin que las corrientes de aire se mezclen directamente. Este sistema mejora significativamente la eficiencia energética al pre acondicionar el aire fresco, reduciendo la carga sobre los sistemas de calefacción y refrigeración. Además, los filtros de aire incorporados eliminan contaminantes y alérgenos, mejorando la calidad del aire interior.
La gestión de la condensación es crucial en estos sistemas. En climas fríos, la transferencia de humedad previene la formación de condensación, mientras que en climas cálidos, la transferencia de humedad reduce la condensación en el aire entrante. Este control eficiente de la humedad es fundamental para evitar problemas como el moho y la condensación excesiva.
En España, con su diversidad climática, los recuperadores entálpicos son especialmente útiles. En la costa mediterránea, reducen la carga de los sistemas de aire acondicionado en verano y recuperan calor en invierno. En el interior y la meseta central, equilibran el calor y la humedad estacionalmente. En el norte, con su clima oceánico, controlan eficazmente la humedad, mejorando el confort.
En Orkli somos conscientes que adoptar recuperadores entálpicos en sistemas VMC de doble flujo no solo mejora la eficiencia energética y el confort térmico, sino que también contribuye a la sostenibilidad, ofreciendo una solución avanzada y rentable para la climatización moderna.